Donación permitió a 642 centros educativos volver seguros a clases presenciales

HATILLO.- El Ministerio de Educación Pública (MEP) distribuyó una serie de suministros de protección personal, para que alrededor de 256 mil estudiantes de 642 centros educativos del país regresaran seguros a clases presenciales.

Así lo detalló la Viceministra de Planificación y Coordinación Regional, Paula Villalta, en un acto simbólico realizado este lunes en la Escuela República de Paraguay, en compañía de los vicepresidentes Epsy Campbell y Marvin Rodríguez; el vicenciller para Asuntos Multilaterales, Christian Guillermet, la representante de El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) Costa Rica, Patricia Portela de Souza, y la encargada de Negocios de la Embajada de los Estados Unidos de América, Gloria Berbena.

Villalta indicó que la donación por ¢722 millones fue realizada conjuntamente entre la Oficina de Asistencia Humanitaria de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID), la Embajada de Estados Unidos en Costa Rica y (UNICEF).

Los centros educativos beneficiados se eligieron por estar ubicados en las zonas con mayor tasa de propagación del COVID-19.

La representante de (UNICEF) en Costa Rica, Patricia Portela, aseveró que, “ la compañía ha constatado el gran trabajo del MEP para garantizar el derecho a la educación, que en Costa Rica es un mandato público y obligatorio. La reapertura de las escuelas era una prioridad urgente, por eso felicitamos al país. No podemos permitir otro año que amenace la capacidad de los niños y niñas de leer, escribir o que pierdan habilidades que necesitan para salir adelante en la economía del siglo XXI”.

La Escuela República de Paraguay recibió 71 galones de jabón líquido, 35 galones de alcohol en gel, 85 galones de desinfectante y 8 termómetros digitales.

Además se informó que dentro de los 642 centros educativos beneficiados se encuentran 205 que atienden a alumnos de educación especial, 119 a estudiantes en condición de refugiados, 16 centros educativos indígenas; así como centros educativos ubicados en Direcciones Regionales de Educación que tienen zonas fronterizas, 73 centros educativos con seguimiento prioritario por sus niveles de exclusión estudiantil y 43 centros educativos de atención prioritaria (centros educativos Promecum).

La donación incluyó alrededor de 37 mil galones de desinfectante, 30 mil de jabón líquido, 15 mil de alcohol en gel, ocho mil termómetros digitales y cinco mil dispensadores de alcohol en gel.

Campbell agradeció a UNICEF y USAID por la cooperación y recordó que, “hoy, más que nunca, es necesario el apoyo del sector privado y de las organizaciones internacionales para garantizar el acceso a una educación segura y de calidad para todo niño, niña y adolescente”.